(Imagen de cabecera: Murina de Antoneta Alamat Kusijanović)

El 18º Festival de Sevilla, que se celebrará del 5 al 13 de noviembre, ha presentado hoy los títulos que conformarán Las Nuevas Olas, una de las secciones más emblemáticas del certamen sevillano, que este año reúne a la última Cámara de Oro y el Gran Premio de la Semana de la Crítica de Cannes, el Cristal a Mejor Película en Annecy, el Gran Premio del Jurado en Sundance o la Mejor Película en Sarajevo o el Gran Premio del Jurado en Sundance. En conjunto, Las Nuevas Olas, compuesta por 12 estrenos en España, propone una aproximación a los retos y desafíos que están hoy en la primera línea del debate europeo, como la inmigración, los refugiados, la lucha a favor de la igualdad real de la mujer, el ascenso de los populismos o la identidad de los pueblos frente a la invasión globalizadora.

Con el objetivo por acercarse a la vida de los refugiados desde lenguajes poco frecuentados, Las Nuevas Olas propone esta edición dos títulos, Flee y Europa. Con el aval de tres premios en el Festival de Annecy y con el Gran Premio del Jurado en Sundance, Flee, del danés Jonas Poher Rasmussen, narra la épica huida desde Afganistán de un joven gay. A medio camino entre el cine de animación y el documental, Rasmussen traslada a la gran pantalla la historia real de un amigo que, en plena invasión soviética en los años 80, buscó refugio en el extranjero. Luego, en Europa, Heider Rashid acude al relato de su propio padre, refugiado iraquí, para retratar la odisea de miles de personas en la frontera entre Turquía y Bulgaria. Con la técnica de la cámara subjetiva, la película ofrece una experiencia inmersiva en la travesía de un joven que trata de sobrevivir a las leyes del bosque y a la persecución de las patrullas fronterizas.

Premio Especial del Jurado en Sevilla 2010 con Semilla de maldad (Tender Son), el húngaro Kornél Mundruczó vuelve a la capital hispalense con Evolution, en la que viaja desde la Segunda Guerra Mundial al Berlín actual a través de tres generaciones de una misma familia, incapaz de reconciliarse con las heridas del pasado y con el horror sufrido durante el Holocausto. Por su parte, Mathieu Amalric también regresa a Sevilla, cuatro años después de ganar el Premio a la Mejor Dirección con Barbara. En esta ocasión, en Hold Me Tight (Serre moi fort), el director e intérprete francés se adentra en la historia de una mujer que rompe las cadenas de su frustrante monotonía familiar. Protagoniza el film Vicky Krieps, inolvidable en El hilo invisible, de Paul Thomas Anderson.

La de Hold Me Tight no es la única historia de esta sección sobre una mujer comprometida con sus propios deseos e inquietudes. Con la participación de Martin Scorsese en la producción, Murina, ópera prima de la croata Antoneta Alamat Kusijanović, llega a Sevilla tras lograr la Cámara de Oro en el último Festival de Cannes para poner sobre la mesa la relación de una joven que desafía a su padre violento. También la relación entre un padre y su hija centra la trama de Moon, 66 Questions, de la griega Jacqueline Lentzou. La protagonista vuelve a casa para cuidar al padre enfermo, regreso que aviva una posible reconciliación. Mejor Película en el último Festival de Sarajevo, este debut impulsa el relevo generacional de la Nueva Ola Griega, en la estela de Lanthimos o Tsangari.

Tras acoger los debuts de cineastas como Luis López Carrasco, Lois Patiño o León Siminiani, Las Nuevas Olas vuelve a apostar por un director español novel para inaugurar esta selección de títulos. Tras una premiada trayectoria en el mundo del corto, el canario David Pantaleón llega al Festival de Sevilla con el estreno mundial de ópera prima, Rendir los machos, como película inaugural de Las Nuevas Olas. Ambientada en Fuerteventura, es una suerte de largo viaje a pie protagonizado por dos hermanos que deben ponerse de acuerdo para cobrar la herencia de su recién fallecido padre, un rico ganadero y productor de queso.

También galardonada en Cannes, donde logró el Gran Premio en la Semana de la Crítica y el Fipresci, llegará Feathers, del egipcio Omar El Zohairy. Este sorprendente debut combina el surrealismo con la crítica sociopolítica a partir de la comedia más absurda. Luego, la ópera prima de los noveles tunecinos Ismaël y Yossef Chebbi, titulada Black Medusa, ahonda también en el machismo y en los roles preestablecidos para la mujer. Rodada en blanco y negro, los directores se sirven del mito de Medusa para contar la doble vida de una joven muda: de día es una reservada montadora cinematográfica y de noche, una cazadora en busca de venganza.

Por último, destacar que la reflexión política, inherente al espíritu de Las Nuevas Olas, se encontrará en una serie de títulos que juegan a su vez con los géneros. En Bloodsuckers, el alemán Julian Randlmaier propone una comedia negra, política y de vampiros para realizar una ácida revisión del marxismo y los populismos de los años 20 del pasado siglo. Por su parte, y bajo la influencia del cine de Ermanno Olmi o los Taviani, los italianos Alessio Rigo de Righi y Matteo Zoppis proponen en The tale of King Crab (Re Granchino) una reinterpretación de los cuentos populares para hacer una contundente crítica a los colonialismos. Una relectura del colonialismo que también está presente igualmente en Liborio de Nino Martínez Sosa, el retrato colorista del líder campesino y religioso Olivorio Mateo, un revolucionario de la República Dominicana de principios del siglo XX.