“Contra todo academicismo” es el título del interesante editorial con el que el Festival Internacional de Cine de Las Palmas de Gran Canaria señala el rumbo de su 17ª edición. “Películas que narran muy poco y se interesan por los tiempos ‘vacíos’. Películas que cuentan ¿ficciones? con seres no ficticios en lugares no ficticios”. Un modelo fílmico bien conocido por la cinefilia y que la organización del certamen canario defiende y cuestiona al mismo tiempo: “Sucede que esa vía difícil se ha convertido en fórmula, en un academicismo del cine-de-arte que confía demasiado en las simpatías del circuito que más contribuyó a revelarlo cuando era novedad: los festivales”. “No es que esa estética –o concepto– se haya agotado, puesto que, como se comprobará en varios títulos seleccionados para nuestra 17ª edición, produce cada año obras dotadas de vigor, y algunas magistrales. Lo que conviene señalar es la transformación de lo que era excepcional en una norma”, rematan desde la dirección del festival.

Para responder al desafío, el Festival de Las Palmas presenta una programación marcada por la voluntad de explorar los márgenes del cine conocido sin encasillarse en los lugares comunes del “cine de festivales”. Un programa que se abrirá con la proyección de Katie Says Goodbye, primer largometraje del estadounidense Wayne Roberts. Entre los días 31 de marzo y 9 de abril, el público canario podrá disfrutar con una Sección Oficial integrada por 13 largometrajes entre los que se encuentran el Gran Premio del Jurado de la pasada Berlinale, Félicité de Alain Gomis, el Oso de Plata a la mejor dirección, El otro lado de la esperanza de Aki Kaurismäki, la película premiada en Un Certain Regard de Cannes, Harmonium de Koji Fukada, el documental nominado al Oscar I Am Not Your Negro de Raoul Peck, y el León de Oro de Venecia, The Woman Who Left de Lav Diaz, entre otras.

Además, el festival grancanario volverá a contar con el trabajo de Alex Ross Perry, al que dedicó una retrospectiva en 2015, con la proyección en competición de Golden Exits, y mostrará los últimos trabajos de los argentinos Albertina Carri (Cuatreros) y Gastón Solnicki (Kékszakállú), los chinos Wang Bing (Bitter Money) y Wang Xuebo (Knife in the Clear Water), el colombiano Iván D. Gaona (Pariente) y la francesa Maud Alpi (Still Life).

Por su parte, la sección Panorama rescata piezas fundamentales del año que devuelven al programa a una serie de autores que forman parte de la historia del Festival. Así, en Las Palmas se verán los nuevos films del maestro coreano Hong Sang-soo (Yourself and Yours / Lo tuyo y tú), el ucraniano Sergei Lonitza (Auzterlitz), el argentino Matías Piñeiro (Hermia y Helena), los franceses Bruno Dumont (Ma Loute) y Olivier Assayas (Personal Shopper), la norteamericana Kelly Reichardt (Certain Women), el brasileño afincado en Estados Unidos Gabe Klinger (Porto), el rumano Radu Jude (Scarred Hearts) y los búlgaros Kristina Grozeva y Petar Valchanov (Slava Glory / Un minuto de Gloria). La programación del festival se completará con las secciones Panorama España, Canarias Cinema, No Future – La nueva ciencia ficción, La noche más freak, Linterna Mágica, y la retrospectiva Iosseliani y Compañía.

Con esta prometedora programación, el Festival de Las Palmas intentará cumplir con el último compromiso expresado en su “editorial”: “Frente a los síntomas de academicismo, los festivales tenemos la responsabilidad de señalar de algún modo las contradicciones, comunes, por otra parte, a cualquier práctica cultural: tras la explosión, toda energía se transforma en inercia. El reto no es entonces rechazar este o aquel modelo, lo cual sería dogmático, sino en identificar primero esas inercias y distinguir después lo singular. El único dogma ha de ser no seguir un dogma”.