El cineclub del Goethe Institut de Barcelona propone en su próxima sesión semanal el visionado del quinto largometraje de Dettlev Buck Hay que ser duro. Este drama social centrado en el narcotráfico y la ruda violencia callejera retrata las penurias de un adolescente de quince años que habita con su madre en Neukolln, uno de los peores barrios del Berlín durante la primera década de este siglo. La trama se desarrolla desde el momento en que el amante rico de la madre de Michael Polischka (David Kross) la abandona y el hijo prodigo debe tomar las riendas de esa desestructurada familia. El joven deberá decir entre tomar o no medidas desesperadas, elección que pondrá en peligro su intensa relación maternofilial.