En el último período de la larga producción de Ken Jacobs, una de las figuras claves para entender el cine experimental en la segunda mitad del siglo XX, brilla con especial intensidad esta pieza que, además, conecta el trabajo del estadounidense con el de los pioneros del mundo del cine. Como explica en forma de introducción el Museo Guggenheim: “La base de la obra es uno de los primeros trabajos de los hermanos Lumière, que muestra a los invitados de una boda entrando en una iglesia de París, a finales del siglo XIX. Jacobs ralentiza de manera extrema la sucesión de fotogramas individuales y duplica la imagen que aparece en la pantalla con un fotograma de diferencia, alternando el ojo con el que se ve el primer fotograma”. En este caso, Jacobs ha optado por la mediación técnica de las gafas en 3D con la que el espectador puede disfrutar de una experiencia inmersiva, a la vez que comprueba como el movimiento de los invitados genera imágenes tridimensionales que hacen que uno se cuestione sin son reales o sólo un artificio de nuestra propia mente. La pieza podrá verse en el Museo Guggenheim hasta el 12 de noviembre. Fernando Bernal

Programación completa del Museo Guggenheim