Vuelve, ya al cien por cien, la programación del CGAI, ya saben, esa filmoteca ideal que habría que inventar si no existiera ya, y lo hace con, entre otras cosas, un ciclo dedicado a repasar la historia de una de las productoras más antiguas, si no la más, del mundo: la Gaumont. No en vano, pocos meses después de la primera proyección pública de los Hermano Lumiére nacía la Gaumont que, hoy, 120 años después, sigue en funcionamiento como productora, distribuidora y exhibidora cinematográfica. Entre las películas elegidas para repasar esos 120 años de historia se encuentran, por ejemplo, este clásico de Max Ophüls, uno de sus autores más emblemáticos, auténtico virtuoso de la cámara, y al decir de Molly Haskell, “Ophüls fue famoso por su cinematografía fluida, pero su cámara errabunda y sus adornos visuales no fueron nunca las florituras de un virtuoso para su propio placer, estuvieron siempre pegadas al movimiento de sus personajes y fueron reveladoras de los movimientos de sus almas”.

Programación completa de CGAI.