Manu Yáñez

El pasado mes de abril, el Ayuntamiento de Madrid inauguraba la City of Madrid Film Office, que busca fomentar los rodajes en la capital española y que venía a llenar el vacío dejado por la Film Comission madrileña, que cerró en 2014 golpeada por la crisis. Según el balance de actividad referente a los dos primeros cuatrimestres de 2018, la renovada Film Office ha gestionado 8.064 solicitudes de permisos de rodaje en la vía pública, entre anuncios, series y películas, con los que ha recaudado más de 230.000 euros, un aumento de casi el 30% con respecto al año anterior.

Entre estos proyectos, cabe destacar el rodaje de La virgen de agosto, el nuevo largometraje de Jonás Trueba, que cuenta con la ayuda a desarrollo de la Comunidad de Madrid y que se verá en cines de la mano de Bteam Pictures. Coincidiendo con la fiestas populares de San Cayetano, San Lorenzo y La Paloma, el director de Los exiliados románticos y La reconquista filmó entre julio y agosto una película contada a través de Eva (Itsaso Arana), una chica de treinta y tres años que hace de su decisión de quedarse en agosto en Madrid un acto de fe. En esos días de fiesta y verbenas se van sucediendo encuentros y azares, y Eva descubrirá que todavía tiene tiempo, que todavía puede darse una oportunidad. Según Trueba, La virgen de agosto nace de reflexiones surgidas de la observación de las transformaciones que sufre la ciudad en verano, “cuando se mezclan los extranjeros con los resistentes autóctonos y conviven en ese Madrid que es más pueblo que nunca”.

El vínculo entre Trueba y su ciudad natal también late en su proyecto alternativo Quién lo impide, que tras presentarse en la Cineteca de Madrid el pasado 20 de junio volverá a ver la luz en el centro cultural Tabakalera de San Sebastián el próximo 6 de octubre. Se trata de “un proyecto cinematográfico de acercamiento a los jóvenes adolescentes de hoy, trascendiendo los formatos de película tradicional y sus cauces habituales de difusión, con vocación de expandirse y articularse en diversos marcos de acción”. Según se apunta en la página web del proyecto, “Quién lo impide es una declaración de intenciones desde su mismo título; es una llamada a transformar la percepción que tenemos sobre la adolescencia y la juventud, pero también es una forma de entender la creación cinematográfica: más libre y abierta, llevada a cabo con pocos medios y por un equipo mínimo de personas, a base de tiempo, perseverancia y actitud”.

Como contrapunto a estoy films autorales, a los que cabría sumar Dolor y gloria, lo nuevo de Pedro Almodóvar, Madrid acogió el pasado mes de junio dos superproducciones internacionales: The Rhythm Section, dirigida por la americana Reed Morano (The Handmaid’s Tale) y producida por Eon Productions (impulsora de la saga James Bond), y Terminator 6, la nueva entrega de la famosa saga creada por James Cameron, dirigida por Tim Miller (Deadpool). Con el apoyo en España de la productora Babieka Films, empresa que ha ofrecido sus servicios a otras producciones internacionales como Exodus: Dioses y reyes (2014) o Blade Runner 2049 (2017), el rodaje de The Rhythm Section se desarrolló en localizaciones de los barrios de la Latina, Sol y Chueca. Por su parte, la empresa española Fresco Film, encargada de la producción en España de Juego de Tronos, colaboró con el equipo internacional de Terminator 6 para convertir algunas calles de los barrios de Lavapiés y Pueblo Nuevo en México, ciudad en la que transcurre parte de la historia.