Cinco proyectos procedentes de Argentina, Chile, España y Reino Unido han sido seleccionados, entre las 185 propuestas recibidas (un 6% más que el año), en el programa de residencias y desarrollo de proyectos audiovisuales Ikusmira Berriak, que organizan el Festival de San Sebastián, el Centro Internacional de Cultura Contemporánea Tabakalera y Elías Querejeta Zine Eskola (EQZE). El comité de selección ha escogido los proyectos de Gabriel Azorín (en la nueva categoría de EQZE), Jaione Camborda (entre los trabajos de la Comunidad Autónoma Vasca), Diego Céspedes (entre los participantes de las cinco últimas ediciones de Nest Film Students), Elena Martín Gimeno (España) y Jessica Sarah Rinland (Internacional).

El español Gabriel Azorín (que presenta el proyecto Anoche conquiste Tebas), integrante de la primera generación de Elías Querejeta Zine Eskola, que forma parte del colectivo lacasinegra, ha presentado sus cortometrajes y un mediometraje en festivales como Belfort, Sevilla o San Sebastián. El chileno Diego Céspedes (que presenta La misteriosa mirada del flamenco) ha sido premiado en Locarno, Cannes y San Sebastián y, como en el caso de Azorín, desarrollará en Ikusmira Berriak el proyecto de su primer largometraje. En cuanto a la cineasta y actriz catalana Elena Martín Gimeno –directora de Júlia Ist y protagonista de Las amigas de Ágata– trabajará en el guion de su segundo largometraje (Creatura). Jaione Camborda también afrontará el proyecto de su segundo largo como directora (O corno do centeo) tras Arima, premiada en Sevilla y Gijón, al igual que Jessica Sarah Rinland, que presenta el proyecto Monólogo colectivo tras la mención especial obtenida en la sección Moving Ahead de Locarno por Those That, at a Distance, Resemble Another.

Por primera vez, el tiempo de estancia de la residencia será de ocho semanas –dos más que en la última edición–. Las y los cinco cineastas llegarán el 2 de marzo a Tabakalera, donde tendrán tiempo para desarrollar su proyecto hasta el 12 de abril. En septiembre, coincidiendo con la celebración del Festival, los cineastas regresarán a San Sebastián para completar las dos últimas semanas de residencia, a las que llegarán con el proyecto más desarrollado para compartirlo con la industria cinematográfica. Cada proyecto contará con una ayuda al desarrollo de 5.000 euros que se entregará en mayo, en mitad de las dos estancias de la residencia, de modo que los cineastas puedan sacar un mayor partido de la experiencia.