Bajo el título de Aroma de Mimosas, el CGAI ha preparado junto al cineasta Oliver Laxe una suerte de carta blanca en la que Laxe acompaña la presentación de su película Mimosas con una serie de títulos que dialogan de forma más o menos evidente con su película, y que generan ecos y posibles conversaciones. Es el caso de la road movie que al mismo tiempo que consolidó el genero acabó con él, y en la que parece que Laxe podría haberse inspirado, aunque fuera de forma libre, para crear su propia versión del arquetipo del viaje constante. Explica el propio Laxe a propósito del pequeño ciclo, que irá acompañado de un taller impartido por el propio cineasta: “Hacer una película es algo así como navegar en un pequeño barco de vela en la noche, en medio de un océano. Es necesario conseguir faros, espejos-guías. Maestros a quienes imitar los gestos nobles. Ondear sus banderas. A pesar de que el diálogo con ellos es torpe e inocente, aunque nunca está a la altura, tenemos que atrevernos y creernos responsables y protectores del tesoro que guardan sus obras”. GdPA

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