La Filmoteca de Andalucía ofrece, justo antes de su pausa estival, la oportunidad de recuperar en pantalla grande High-Rise, uno de los títulos más interesantes del año y que, desgraciadamente, pasó de manera bastante desapercibida por las salas españolas. La película se presentó en la sección oficial del último festival de cine de San Sebastián, si bien, al igual que ocurrió con la Sunset Song de Terence Davies, no consiguió premio alguno en el certamen donostiarra. Posiblemente el jurado se resintió ante una adaptación (se basa en la novela homónima de J.G. Ballard) que es, sin lugar a dudas, irregular, pero eso aquí no tiene por qué ser leído necesariamente como una pega: hay tantas ideas por secuencia que rebasan los planos y, en ese sentido, es normal que haya momentos en los que la película se inunde a sí misma. High-Rise tiene cambios de tono y de ritmo drásticos y acepta el riesgo de que el espectador no siempre sepa adelantarse a los mismos o situarse a su lado, pero la experiencia global es tan inmensa que al terminar uno se queda con la sensación de haber asistido a un proceso de construcción en su totalidad. Se trata de una película que está construida en vertical con todo el vértigo que eso supone, pero resulta imposible no querer asomarse por el balcón e intentar atisbar qué hay al fondo de cada plano. La filmografía anterior de Ben Wheatley presagiaba un cineasta interesante pero High-Rise, sin duda, lo confirma. ER

Programación completa de la Filmoteca de Andalucía.