(Imagen de cabecera: Mediterranean Fever de Maha Haj)
Entre el 2 y el 12 de noviembre, la Filmoteca de Catalunya volverá a acoger la Mostra de Cinema Àrab i Mediterrani de Catalunya, que este año llega a su decimoséptima edición y que por primera vez será competitiva, con la entrega de tres galardones: el Premi Flama al mejor largometraje de ficción, un segundo premio al mejor documental y el Premi del Públic. Organizada por la ONG Sodepau, la Mostra se ha consolidado como una ventana abierta a “la creatividad, la reflexión y las personalísimas miradas de las cinematografías del mundo árabe”. Con la Filmoteca de Catalunya como sede central, el festival mostrará 13 largometrajes y un programa de cortometrajes procedentes de Siria, Palestina o el Líbano, entre otros países, que abordan temáticas como el movimiento queer, el aborto, la prostitución y el peso de la memoria. Este año, la Mostra se asocia con el festival L’Alternativa para organizar la proyección de It Must Be Heaven del cineasta palestino Elia Suleiman.
De entre las visitas que recibirá la Mostra, destaca la de Habiba Djahnine, cineasta y activista argelina que presentará, en la Biblioteca de la Filmoteca, el proyecto Cinéma et Memoire, que lleva desarrollando desde 2007. También asistirán a la muestra barcelonesa, para presentar sus películas, los directores Mohammad Shawky Hassan y Batoul Karbijha.
La Mostra se inaugurará el 2 de noviembre con la proyección de Mediterranean Fever, de la árabe-israelí de origen palestino Maha Haj. Ganadora del premio al mejor guion en la sección Un Certain Regard del Festival de Cannes en 2022, esta comedia negra es también la historia de una insólita amistad entre un escritor deprimido y su vecino. Con esta película, Haj pone el foco en las contradicciones sociopolíticas que supone ser palestino y vivir en Haifa.
En cuanto a los conflictos del mundo árabe, en la Mostra se verá la irreverente Bashtaalak sa’at (¿Te comparo con un día de verano?). Su director, el egipcio Mohammad Shawky Hassan, presentará la proyección de este musical queer, que mezcla clichés pop, poemas de Wadih Saadeh y relaciones homosexuales. Por su parte, desde el Yemen llegará Al Murhaqoon de Amr Gamal, que aborda el tema del aborto a través de la historia de un matrimonio con tres hijos que no puede asumir un cuarto embarazo. Desde Marruecos, llegará Les Damnés ne pleurent pas de Fyzal Boulifa, que se centra en el vínculo entre una mujer y su hijo adolescente cuando, camino de Tánger, atraviesan un país roto por las diferencias socioeconómicas y sociales. Y luego, Mohamed Kordofani firma Wadaean Julia, la primera película sudanesa en participar en la Selección Oficial del Festival de Cannes.
(My Maysoon de Batoul Karbijha)
En cuanto al ámbito de la no ficción, cuatro serán los documentales que formarán parte de la programación de la Mostra. En My Maysoon, la siria Batoul Karbijha –que visitará la Mostra– explora el caso de su hermana, desaparecida después de que el barco que la llevaba a Europa naufragara en el Mediterráneo. También se verá Anxious in Beirut, en el que el libanés Zakaria Jaber narra sus intentos frustrados por salir de su país, una nación golpeada por crisis económicas, políticas y sociales. Luego, se verá My Way Home, con la que el sirio Wael Kadlo hace un ejercicio de catarsis familiar resiguiendo sus orígenes. Y, finalmente, también forma parte de la programación el documental Ethan Asharasariran (Doce camas), de la libanesa Reine Mitri, que se aproxima a la realidad de los hijos de los mártires de las revoluciones palestinas de finales de los años 60.
En la Mostra, también habrá espacio para la recuperación de clásicos. Por un lado, se proyectará Tahia ya Didou!, único film dirigido por el actor Mohamed Zinet, en 1971, que mezcla ficción y documental para ofrecer una imagen vitalista pero también crítica de la realidad argelina. De hecho, el film era un encargo del Ayuntamiento de Argel, pero una escena que mostraba el encuentro casual entre un soldado francés y una de las víctimas de sus torturas llevaron al ayuntamiento a guardar la película en un cajón durante muchos años. En la Mostra también se verán los clásicos La Zerda ou les chants de l’oubli (1983) de la argelina Assia Djebbar y Nashidul Hajar (1990) del palestino Michel Khleifi, que cuenta la segunda oportunidad de una historia de amor entre dos palestinos que se conocieron y enamoraron en los años 70.
