Según ha anunciado hoy la organización de la Mostra de Venecia, los Leones de Oro honoríficos de la 73ª edición del festival de cine más antiguo del mundo serán para el actor francés Jean-Paul Belmondo y el cineasta polaco Jerzy Skolimowski. La decisión fue tomada por el Consejo de Dirección de la Biennale de Venecia, presidido por Paolo Baratta, por recomendación del Director de la Mostra, Alberto Barbera.
Belmondo es todo un icono del cine francés, un emblema de la Nouvelle Vague gracias a su representación de personajes alienados en Al final de la escapada y Pierrot le Fou, ambas de Jean-Luc Godard, o en La sirena del Mississipi de François Truffaut. Según la organización de la Mostra, “Belmondo dio protagonismo a la figura del antihéroe provocador y seductor, una alternativa a los estereotipos de Hollywood en los que Godard basó sus personajes. En palabras de Alberto Barbera, “gracias a su fascinante rostro, su encanto irresistible y su extraordinaria versatilidad, interpretó roles en dramas, films de aventuras e incluso comedias, convirtiéndolo en una estrella respetada por todos”.
En referencia a Jerzy Skolimowski, el otro galardonado, Barbera apuntó: “es uno de los máximos exponentes del cine moderno de las nuevas olas de los 60. Junto a Roman Polanski, contribuyó a la renovación del cine polaco durante ese periodo”. En realidad, el medio siglo de trayectoria del “poeta boxeador” (según lo denominó Andrezj Munk, su director de fotografía), durante el cual ha realizado 17 largometrajes, ha sido un ir y venir entre Polonia, Bélgica, Inglaterra o Estados Unidos. Su trilogía de películas polacas con las que debutó –Rysopis, Walkover y Bariera– fueron para el bloque del este lo que las películas de Godard para el cine occidental, mientras que sus otras obras maestras, de Le Départ a Trabajo Clandestino, siguen siendo emblemas del cine moderno. Las últimas películas del maestro, tras su retorno a Polonia, Cuatro noches con Anna, Essential Killing y 11 minutes despliegan una sorprendente capacidad de renovación, que lo sitúan entre los más combativos y originales cineastas del cine contemporáneo.
