(Imagen de cabecera: La canta delle marane de Cecilia Mangini)
Cineteca Madrid se suma a la celebración del centenario del nacimiento de Pier Paolo Pasolini programando algunas de sus películas más desconocidas junto a otras en las que participó como guionista o narrador, en un ciclo titulado Constelación Pasolini. Además, el ciclo incluye adaptaciones de sus novelas al cine, de la mano de otros cineastas, y una selección de películas de directores que influyeron en la obra de Pasolini o que fueron influidos por él y por su cine.
Según apuntan los organizadores del ciclo, “la onda expansiva de Pasolini llega hasta nuestros días a través de cineastas tan fascinantes como Cecilia Mangini, Ermanno Olmi, Paolo y Vittorio Taviani, Pietro Marcello o Alice Rohrwacher, como muestra de la profunda marca que el escritor, cineasta, pintor y polemista italiano dejó en la cultura del siglo XX”. Así, con motivo del centenario de Pasolini, la sección (Re)visiones de Cineteca Madrid ofrece algunas de las películas más desconocidas de Pasolini, como Apuntes para una Orestíada africana (1970), ensayo cinematográfico entre el documental y la ficción que narra la insólita incursión del cineasta italiano en África, en busca de motivos y personajes para una posible adaptación de la Orestíada de Esquilo.
Además, es la oportunidad de acercarse a La rabia, el material que Pasolini filmó en 1963 y que vio la luz en 2008, integrado en la película de Giuseppe Bertolucci titulada La rabbia. Hipótesis de reconstrucción de la versión original de Pasolini. Y también es momento de descubrir una sorprendente colaboración del cineasta con Paola Faloja en la película Il ragazzo motore, con texto y voz en off de Pasolini, que reflexiona sobre el amor de los jóvenes italianos por las motos. El ciclo incluye también la adaptación de 1962 de la novela de Pasolini, Una vida violenta, dirigida por Paolo Heusch y Brunello Rondi.
En cuanto a los coetáneos de Pasolini, desde Cineteca, se señala que “pocos cineastas como Ermanno Olmi complementan y acompañan el esfuerzo pasoliniano por superar la estética neorrealista a lo largo de los años sesenta”. Definido por el propio Pasolini como paradigma del “cine de prosa”, Olmi fue un director prolífico y comprometido, defensor incansable del espíritu humano en conexión con la naturaleza y la tradición. También en la sección (Re)visiones del mes de diciembre, Cineteca ofrece cuatro películas fundamentales de distintas etapas de la filmografía de Olmi: El empleo (1961), El árbol de los zuecos (1978), Larga vida a la señora(1987) y El oficio de las armas (2001).
En el marco de la Constelación Pasolini, Cineteca Madrid recupera el legado de Cecilia Mangini, figura única en la historia del cine italiano. Pionera feminista, activista y ejemplo de compromiso político y estético, estrecha colaboradora de Pasolini en varias ocasiones, “su legado cinematográfico está impregnado de una inusual lucidez y fuerza estética, y sus películas representan el choque de la tradición y la modernidad con un profundo lirismo”. La sección (Re)visiones continúa ensanchándose en diciembre para ofrecer dos sesiones dedicadas a Cecilia Mangini, con nueve de sus películas cortas más significativas. La primera de ellas, titulada Cantos Pasolinianos, incluye los cortometrajes Stendali suonano ancora (1960, 11’), La canta delle marane (1961), La pasione del grano (1959), Maria e I giorni (1960) y Divino amore (1961). La segunda sesión, titulada Visiones de Italia, incluye las películas cortas Tomasso (1967), La briglia sul collo (1974), Brindisi ‘65 (1967) y Felice natale (1964).
Y para completar esta programación en torno a Pasolini en la sección (Re)visiones de diciembre, Cineteca Madrid rastrea la influencia de Pasolini en las películas de algunos de los jóvenes cineastas italianos más relevantes de la actualidad: Lazzaro feliz de Alice Rohrwacher, I comete de Pascal Tagnati y Bella y perdidade Pietro Marcello son propuestas valientes y singulares, que actualizan y mantienen vivo el aliento poético y el incombustible inconformismo pasoliniano.