Página web del D’A Festival de Cine de Barcelona (4-14 de abril)

MAMÁNTULA | Ion de Sosa | Alemania, España | 2023 | 48 min.

Colaborador habitual de Chema García Ibarra y Luis López Carrasco en tareas de dirección de fotografía, Ion de Sosa cuenta con dos largometrajes en su haber –True Love (2010) y Sueñan los androides (2014)– que además de ser notables ya perfilaban un estilo muy propio. Su nueva propuesta se presenta como una extensión, un paso más allá, de lo planteado en Sueñan… Porque el autor donostiarra recurre a la ciencia ficción, en la que aterriza de nuevo desde la extrañeza, para narrar una historia de corte fantástico, formulada con total libertad y dejando que el relato fluya entre la provocación, el ingenio y otros recursos inesperados.

Replicar la sinopsis de Mamántula ya revela un espíritu nada ortodoxo. El título hace referencia a un joven de apariencia humana que en su interior esconde una araña gigante, y que se dedica a tener encuentros fugaces con otros hombres para acabar con ellos, absorbiendo su sangre, su semen y su vida. El director cita entre sus referencias para esta película A la caza (1980) o La posesión (1981); a nivel visual y de diseño de producción, la pintura de Francis Bacon y las fotografías de Nan Goldin; y, por supuesto, Under the Skin (2013), por la forma en la que el asesino arácnido, con origen fuera de este planeta, adopta forma humana. Estamos, sin duda, ante una propuesta apasionante a nivel visual, que confirma a De Sosa como un cineasta que siempre busca los márgenes de lo narrativo. Ocurre, eso sí, que tras su visionado deja con ganas de más, de saber cómo hubiera discurrido esta historia si se hubiera prolongado más allá de sus casi cincuenta minutos hasta transformarse en un largometraje. Fernando Bernal

ARTURO A LOS 30 | Martín Shanly | Argentina | 2023 | 92 min.

Arturo (Martín Shanly) es un treintañero en permanente estado de indecisión y confusión. Por momentos, lo vemos cuidando a su hermana menor Olivia (Julia Ezcurra), pero en verdad apenas puede hacerse cargo de sí mismo. Nuestro perfecto anithéroe es una acumulación de torpezas (verbales y físicas), alguien que siempre parece estar en el lugar y el momento equivocados, un adolescente tardío, un tipo que no encaja en las responsabilidades y mandatos de la sociedad actual.

Tragicomedia en la que lo trágico (hay muertes y funerales, por ejemplo) se expone sin dimensiones ni connotaciones épicas y lo cómico se presenta de forma casual y asordinada, Arturo a los 30 apuesta por la acumulación con unos cuantos pasajes inspirados y sorprendentes. La acción transcurre entre 2017 y 2020 (los primeros síntomas de la pandemia se integran sobre el cierre a la trama con, claro, clases por zoom) y en ese ir y venir habrá desde una fiesta de casamiento de su amiga Daphne (Camila Dougall) hasta un absurdo accidente automovilístico, desde teatro dentro del cine (hay una participación especial de Pilar Gamboa) hasta un viaje a Esquel. Y habrá personajes hétero, homo y transexuales. Y viejos amantes en fuga, y reencuentros, y nuevos amantes ocasionales. Y mucho alcohol y no menos drogas. Y enredos múltiples.

Suerte de continuación de Juana a los 12Arturo a los 30 es una película que por momentos remite al primer Nanni Moretti, a Martin Rejtman, a Elia Suleiman y al Paul Thomas Anderson de Embriagado de amor, pero que encuentra en su deriva, sus personajes excéntricos y su narración fragmentaria y pendular un estilo y un vuelo muy particulares. Diego Batlle

ANIMAL | Sofia Exarchou | Grecia, Austria, Rumania, Chipre, Bulgaria | 2023 | 116 min.

Todo son risas, cantos, bailes y juegos en el Hotel Mirage, uno de los tantos complejos que abundan en ese paraíso turístico que es Grecia. Jubilados en busca de entretenimiento para pasar el tiempo y jóvenes que quieren algo de desenfreno en las discotecas. Pero la cámara de Sofia Exarchou no priorizará a esas huéspedes sino a los encargados de organizar cada día y cada noche las distintas actividades recreativas. La más veterana y curtida del staff es Kalia (Dimitra Vlagopoulou), una empleada todoterreno (canta en vivo, baila en plan sensual y a puro erotismo, supervisa y participa en distintas prendas) que vive de manera más que precaria con su pequeña hija y tiene una relación no demasiado intensa con un compañero de trabajo. En el inicio de la temporada fuerte veraniega se suman al hotel muchos trabajadores temporales de países como Ucrania, Kazajistán y Polonia. De este último origen es Eva (Flomaria Papadaki), una muchacha que tendrá que superar sus represiones y timideces para incursionar en este universo de la animación para adultos. Y Kalia funcionará como una suerte de maestra que le enseñará los detalles y secretos del asunto.

Alejada por completo del lujo y del glamour, Exarchou está más interesada en los detalles, las pequeñas observaciones de la dinámica cotidiana que en grandes denuncias o revelaciones. Es un film intimista, que coquetea pero elude el patetismo a-la-Ulrich Seidl, parece algo así como un reverso de Aftersun (las angustias y frustraciones están puestas en el lado de los trabajadores) y le dedica mucho tiempo a los gestos y las expresiones corporales (notable trabajo en ese sentido de la directora de fotografía polaca Monika Lenczewska). La guionista y directora griega va describiendo el creciente malestar (psicológico e incluso físico) de Kalia, una mujer cuarentona que debe fingir alegría, simpatía y sonrisas mientras atraviesa y disimula para el afuera una profunda crisis existencial. Algo árida y un poco larga en sus 116 minutos, Animal resulta de todas maneras una inquietante y en varios pasajes fascinante mirada a las contradicciones y miserias del capitalismo salvaje aquí encapsuladas en un paradisíaco enclave turístico.Diego Batlle

LOLO & SOSAKU: THE WESTERN ARCHIVE Sergio Caballero | España | 2024 | 66 min.

Tras su estreno en el Festival de Rotterdam –donde Sergio Caballero se alzó con el Tiger Award en 2010 por Finisterrae, Lolo & Sosaku: The Western Archive llega al D’A Film Festival con su inclasificable mezcla de western surrealista, arte visual de vanguardia y experimentación sonora. Lolo & Sosaku es inconcebible sin los dos artistas que aparecen en el propio título de la película: el argentino Lolo y el japonés Sosaku. Afincados en Barcelona desde 2004, el dúo lleva más de una década siendo referente mundial en cuanto a la experimentación con el sonido, creando nuevas texturas acústicas a partir de instrumentos inventados específicamente para sus performances y difuminando las fronteras entre música y ruido. En cierto modo, Caballero intenta trasladar el arte de la pareja de artistas a un medio totalmente distinto a la performance en directo a la que están acostumbrados. El resultado es una experiencia a la que hay que acudir predispuesto a dejarse llevar por las sensaciones y las emociones. Josep Santcristòfol

LÉGUA João Miller Guerra y Filipa Reis | Portugal, Francia, Italia | 2023 | 119 min.

Ana (Carla Maciel) tiene 48 años, un marido llamado Victor (Paulo Calatré) que quiere irse a trabajar a Francia y una hija veinteañera, Mónica (Vitória Nogueira da Silva), que planea su futuro en una ciudad grande como Porto. Por el momento, todos están en la Légua del título, una casa enorme y señorial cuyos dueños viven en Lisboa. Ana mantiene y limpia el lugar junto a Emília (Fátima Soares), una anciana bastante molesta, seca y malhumorada. Cuando a Emilia, a la que Ana llama cariñosamente Milinha, le diagnostican un mieloma, que implica un progresivo deterioro de los huesos, sus familiares le aconsejan que se vaya con su marido a Francia, pero Ana no está dispuesta a “limipar la mierda de los franceses” y se mantiene en su decisión de cuidar a Milinha incluso en esas instancias cada vez más degradatorias.

A pesar de su temática por momentos muy angustiante, Légua está trabajada con la necesaria elegancia y austeridad como para no caer en el golpe bajo ni en recargados dilemas éticos y morales a-la-Michale Haneke. En verdad, este segundo trabajo de ficción de la dupla aborda las diferencias generacionales (la hija y su amiga Sofia tienen una visión muy distinta de las cosas respecto de Ana), de género (Ana tambén difiere de lo que pretende su marido Victor), de clase (los dueños ricos de Lisboa y los personajes de la película que se encargan de mantener el lugar), de vida entre lo rural y lo urbano, e incluso de tiempos, ya que Ana de alguna manera es quien intenta sostener la impronta del lugar frente a un “progreso” que puede terminar de forma bastante inminente con esas tierras y esa propiedad.

La película está construida con escenas muy largas. Los directores se toman todo el tiempo que necesitan para mostrar acciones en principio muy simples como tender una cama, cocinar unos dulces, pelar una naranja o trabajar la tierra como si fueran rituales complejos y dignos de las mejores tradiciones. Esa obsesión por el detalle se acentúa cada vez más cuando vemos a Ana cuidar a la decadente Milinha, quien ya no puede ir sola al baño ni limpiarse o alimentarse. Esta decisión radical en el tempo, claro, puede resultar algo expulsiva para cierto segmento de un público más impaciente.

Es cierto que la película tiene algunos pasajes muy tristes y dolorosos, pero Légua tiene también muchos momentos de alegría (la fiesta del cumpleaños 49 de la protagonista termina con cantos y bailes), muchos temas populares portugueses y momentos de enorme belleza y sensibilidad, como cuando ella se tira al piso y abraza a uno de los perros, o cuando los directores filman el bellísimo entorno montañoso y rural sin caer en innecesarios regodeos fotográficos. Las actuaciones son muy ajustadas al tono y los climas que busca la película y, en ese sentido, es Carla Maciel quien expone los diversos matices de una Ana que resiste presiones, mandatos y hasta promesas de un futuro mejor para cumplir con lo que ella cree y siente que debe hacer. Una película sobre los compromisos y los principios incluso frente a los rechazos ajenos y a la inminencia de la muerte. Diego Batlle

THE FEELING THAT TIME FOR DOING SOMETHING HAS PASSED Joanna Arnow | Estados Unidos | 2023 | 87 min.

Estrenada en la Quincena de Realizadores del último Festival de Cannes, esta ópera prima de Arnow con Sean Baker como uno de sus productores remite por momentos a los universos de Lena Dunham y Miranda July, pero sobre todo encuentra ciertas conexiones con Shiva Baby, aquel film de Emma Seligman que tenía una notable actuación de Rachel Sennott.

Arnow también es la protagonista en el papel de Ann, una treintañera que tiene un puesto como ejecutiva menor en una empresa burocrática como tantas y mantiene múltiples relaciones sexuales sadomasoquistas en las que adopta siempre un lugar de completa sumisión. Pese a la descripción, no hay nada demasiado perverso ni enfermizo en esos encuentros, pero tampoco esas experiencias parecen entusiasmarla demasiado.

El film –rodado con mínimos recursos en la ciudad de Nueva York– tiene como contexto la familia judía disfuncional de la propia Ann (los padres son interpretados por los progenitores de Arnow en la vida real) y de alguna manera sintoniza con cierta sensación llena de contradicciones, pequeñas insatisfacciones, angustias y búsquedas no tradicionales tan propias de estos tiempos convulsos. Y lo hace sin subrayados, sin golpes de efecto aleccionadores, con una puesta en escena muy simple y directa, apelando a un humor deadpan y a una sinceridad que se agradece. Diego Batlle