El Festival de Cine Europeo de Sevilla celebra dos décadas de existencia con una edición que tendrá lugar entre los próximos 23 y 29 de noviembre, y que constará de seis secciones donde el audiovisual andaluz conversará con la obra de directores consagrados y con nuevos talentos reconocidos con premios en festivales internacionales. Serán un total de casi 90 películas, entre cortometrajes y largometrajes, que se proyectarán en las salas de MK2 CineSur Nervión Plaza y el Teatro Cervantes. Los programas más numerosos serán la Sección Oficial y Panorama Andaluz, con 22 y 17 propuestas, cada una. Las secciones EFA, donde se concentran las producciones nominadas a los Premios del Cine Europeo, y Nuevas Olas, destinada a “mostrar trabajos que asumen una búsqueda formal singular”, serán más breves. Completan la programación los apartados Cine en familia y Clásicos restaurados.

En la Sección Oficial del SEFF se verán films de Michel Gondry, con la comedia El libro de las soluciones, Wim Wenders, con el documental Anselm, Catherine Breillat, con el drama El verano pasado, Matteo Garrone, con el drama migratorio Yo, Capitán, Trần Anh Hùng, con el drama gastronómico A fuego lento, y el danés Nikolaj Arcel, con el drama histórico La tierra prometida. Les acompañarán otros cineastas ilustres del circuito de festivales, caso del argentino Lisandro Alonso (Eureka), la alemana Angela Schanelec (Música), el belga Joaquim Lafosse (Un silencio) y la austríaca Jessica Hausner (Club Zero). Su compatriota Patrick Chiha coincide con el francés Bertrand Bonello en adaptar La bestia en la jungla, de Henry James. El primero, en La bête dans la jungle, y el segundo con La bête, incidiendo en los conflictos éticos y filosóficos contemporáneos punteados a través de diversos tiempos históricos.

Los españoles Víctor Iriarte y Javier Macipe también visitarán el SEFF con sus primeras películas. El bilbaíno con Sobre todo de noche, y el zaragozano con su biopic sobre el músico Mauricio Aznar, La estrella azul. En su retrato del líder del grupo de rock Más Birras, Macipe ha contado con un amplio equipo andaluz, fruto de su beca de formación en la Fundación Antonio Gala. Del mismo modo que Pablo Berger ha contado como director de arte para su debut en la animación, Robot Dreams, con el sevillano José Luis Agreda.

La sección Panorama andaluz se mantiene como uno de los ejes fundamentales de la programación del festival. Entre los títulos más relevantes de este año se encuentran Sueños y pan, una actualización del cine quinqui pasada por el tamiz de la nouvelle vague a cargo del cineasta de Baena Luis (Soto) Muñoz; y la coproducción búlgara Liuben, en la que Venci Kostov acompaña el angustioso regreso de un migrante búlgaro a su país por el fallecimiento de su abuelo. El SEFF arropará el debut como documentalistas del periodista Javi Barón, que realiza en Feudo un retrato del pueblo malagueño Villanueva de Cauche. Completan la sección títulos adscritos al género documental, como Caleta Palace de José Antonio Hergueta, La Singla de Paloma Zapata, y Aníbal. El arquitecto de Sevilla de Paco Ortiz, entre otros.

(Samsara de Lois Patiño)

Por su parte, los directores programados en la sección Nuevas Olas “afrontan sus historias desde el riesgo y la experimentación para encontrar un estilo cinematográfico genuino”. Tal es el caso del español Pedro Aguilera, quien en Splendid Hotel narra las vicisitudes del poeta Arthur Rimbaud en África como traficante de armas a través de una absoluta libertad narrativa y estilística. O de Virginia García del Pino, que en La estafa del amor parte del caso de un hombre acusado de timar a mujeres después de seducirlas para debatir sobre el afecto con especialistas y particulares. El debut en el largometraje del italiano Giacomo Abbruzzese, Disco Boy, es un viaje visual y sonoro inmersivo, mientras que Samsara, del vigués Lois Patiño, aspira a convertir el cine en un espacio de meditación colectiva. Por su parte, el belga Bas Devos se reitera en su capacidad para rescatar la belleza en paisajes urbanos en Aquí, Premio a la mejor película en la sección Encuentros de la Berlinale.

La sección EFA incluye, como sus siglas indica, un destilado de las películas nominadas este año a los Premios del Cine Europeo. Entre sus ocho propuestas, destacan la Palma de Oro y el Premio del Jurado en esta última edición de Cannes, la francesa Anatomía de una caída, de Justine Triet; y la finlandesa Fallen Leaves, del veterano Aki Kaurismäki; el Oso de Oro de la Berlinale, Sur l’Adamant, del documentalista francés Nicolas Philibert; El cielo rojo, de Christian Petzold, Gran Premio del Jurado en la Berlinale; y la ópera prima de la británica Molly Manning Walker, How to Have Sex, galardonada como mejor película en la sección Una cierta mirada en Cannes. La sección se completa con La quimera de Alice Rohrwacher; el cortometraje Aqueronte, del sevillano Manuel Muñoz Rivas, ganador del Premio KNF del Círculo de Periodistas Cinematográficos Holandeses en el Festival de Rotterdam; y las apuestas para los Óscar de Alemania y Lituania, La sala de profesores, de Ilke Çatak, y Slow, por la que Marija Kavtaradze fue reconocida con el premio a la mejor directora en la sección World Cinema en Sundance.

La sección Cine en familia oferta cuatro películas de animación. Nina y el secreto del erizo supone la vuelta de Audrey Tautou al cine, pero como actriz de doblaje, en una cinta de aventuras sobre una niña que sale en busca de un tesoro escondido en la antigua fábrica donde trabajaba su padre. La película se exhibió fuera de concurso en el Festival de Annecy, donde la vertiginosa aventura familiar ¡Linda quiere pollo!, de Chiara Malta y Sébastien Laudenbach, se hizo con el Cristal al mejor largometraje. En la húngara Tony, Shelly y la linterna mágica, Filip Posivac recupera la tradición de la animación stop-motion de los países del Este, mientras que Mary y el pastel de coliflor y canela es una coproducción de siete países europeos en la que el italiano Enzo D’Alò adapta la novela homónima de Roddy Doyle.

Este año marca la vuelta a la gran pantalla de un director contemporáneo imprescindible, Víctor Erice. El estreno de su cuarta película, Cerrar los ojos, ha supuesto un acontecimiento para la comunidad de aficionados al séptimo arte, y en Sevilla se va a complementar con una retrospectiva de toda su carrera. La audiencia podrá revisar o maravillarse por vez primera con su ópera prima, considerada hoy obra de culto, El espíritu de la colmena. La cinta, Concha de Oro en San Sebastián en 1973, celebra este año, precisamente, su 50 aniversario. Luego, la sección Clásicos restaurados enriquece la oferta cinéfila del SEFF, rescatando del olvido, entre otras joyas fílmicas, la adaptación de la zarzuela Gigantes y cabezudos por parte de Florián Rey, en 1925. Fruto de la colaboración con la Filmoteca de Andalucía esta selección se completará con títulos que forman parte del patrimonio audiovisual andaluz.