La Filmoteca de Catalunya dedica un necesario ciclo a la figura de Kaneto Shindô, el más desconocido de los grandes cineastas japoneses. Maestro del retrato femenino, explorador de la relaciones entre el sexo y la muerte, retratista del horror nuclear, Shindô imprimió a su cine su espíritu independiente (de hombre de izquierdas) después de formarse en el cine clásico de estudios. En el ciclo de la Filmoteca, además de varias de las películas clave de Shindô, encontramos uno de sus documentales más célebres, el que dedicó a Kenji Mizoguchi, otro de los patriarcas de la cinematografía nipona. Cuenta la leyenda que, al leer los primeros guiones de Shindô, Mizoguchi le dijo al joven aprendiz que no tenía talento para la escritura fílmica. En 1975, un Shindô que havía llegado a lo más alto como guionista del estudio Shochiku rodó un documental que tomó la forma de emocionado homenaje al director de Cuentos de la luna pálida. MY
Programación completa de la Filmoteca de Catalunya.