La siempre fructífera filmografía de Portugal lleva años arrojando obras maestras, y trabajos inolvidables, como el recientemente “recuperado” nombre de Rita Acevedo Gomes, una cineasta casi ignorada o desconocida en España que, poco a poco, va ocupando el lugar que se merece. Sobre su anterior película (ahora acaba de estrenar Correspondencias en el Festival de Locarno), ya escribió, y quién mejor, Álvaro Arroba en estas mismas páginas. Dejemos que sea él quien recomiende este pase imprescindible: “es una especie de apoteosis del oficio del cine entendido como trabajo artesanal, meticulosamente elaborado por manos femeninas. Una traslación meticulosa del cuento de Barbey D’Aurevilly con la idea inédita en todo el cine de no adaptar el contenido de la obra literaria, sino el libro entero como un precioso objeto físico”. GdPA

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