El Festival Internacional de Cine de Las Palmas de Gran Canaria ha anunciado hoy el palmarés de su vigésimo primera edición. El jurado ha otorgado la Lady Harimaguada de Oro a la película Memoryland de Kim Quy Bui. En su fallo, el jurado ha descrito el film vietnamita como «una película que cuestiona la supervivencia del alma de una cultura, así como de sus muertos, a través de sus ritos funerarios, en una sociedad que lucha entre la tradición y la modernidad, la espiritualidad y el materialismo. La película tiene una narración compleja pero fluida e imágenes impactantes acompañadas de la interpretación sutil y conmovedora del conjunto de sus actores».
El segundo premio, la Lady Harimaguada de Plata, ha recaído en la película ruandesa Father’s Day de Kivu Ruhorahoza. De este título, el jurado ha destacado que «la puesta en escena dirige muy bien el fluir y las tres secciones o movimientos de la película. El film, que muestra las nuevas condiciones del pueblo ruandés tras el genocidio, es una nueva apuesta del cine en Ruanda que empuja la creatividad de los cineastas y de todas las otras personas involucradas en hacer cine. La película también ofrece una visión hermosa de la naturaleza, iluminada por vitalidad y compartida entre los paisajes y las personas». Asimismo, de este largometraje, Father’s Day, el jurado, por su actuación «sólida y poderosa», destaca a las dos protagonistas de la cinta, Aline Amike y Mediatrice Kayitesi. Ambas compartirán el Premio a Mejor Actriz «por estar en el mismo nivel de interpretación. Son un valor añadido para la película, aportándole fuerza y un significado vivo».
El jurado de la Sección Oficial, integrado Lucile Hadzihalilovic, Rita El Khayat y Tiina Lokk, ha concedido, además, una mención especial a la cinta vietnamita Children of the Mist de Ha Le Diem “por mostrar la valentía que supone la elección entre el matrimonio y la educación para las adolescentes de esta comunidad tradicional del norte de Vietnam. La directora ha logrado acercarse lo suficiente a las personas que ha filmado, haciendo que toda la comunidad abra su alma y corazón libremente. Y, en especial, su protagonista, la joven y vital Ma Thi Di.”. Por su parte, la coproducción entre Suiza, Francia y Bélgica La ligne de Ursula Meier se alzó con el Premio del Público de esta vigésima primera edición del Festival de Cine.
El jurado encargado de valorar los trabajos presentados en esta sección Panorama España, apartado que ha competido por primera vez en el Festival de Cine de Las Palmas de Gran Canaria y que ha estado integrado por Patra Spanaou, Olivia Cooper-Hadjian y Edouard Waintrop, ha premiado Los caballos mueren al amanecer de Ione Atenea «por la forma en que la directora recreó con destreza y respeto el destino y los sentimientos de tres personajes genuinos y dotados, dándonos una idea de cómo podrían haberse desarrollado las vidas y transmitiendo un sentido poético». El jurado ha otorgado, además, una mención especial a Cinco lobitos de Alauda Ruiz de Azúa.
En la categoría de cortometrajes, el premio ha recaído en el trabajo de la directora Janaina Wagner, Curupira e a máquina do destino, decisión que ha argumentado el jurado «por capturarnos con su cualidad cinematográfica, su dimensión política y su atmósfera poética y mística». Igualmente, el jurado de la Sección Oficial creyó oportuno otorgar una mención especial al cortometraje alemán Biting the Dust de Neozoon «por el enfoque contemporáneo y humorístico a lo absurdo de los sistemas de creencias humanas y cómo funcionan a través de un collage de vídeos de YouTube».
El jurado de la sección Banda Aparte concedió el premio al largometraje Rewind & Play de Alain Gomis. Para el jurado, formado por Rosa Pérez, Marina Kozul y María Vera, el trabajo Rewind & Play es digno de resaltar «por el meticuloso y provocativo montaje de un archivo inédito que confronta a la audiencia a una escena que permite múltiples y complejas lecturas. Por un lado, el director logra mostrar la crudeza del espectáculo mediático en la forma que un artista es cosificado y, por otro, plasma una sagaz interpretación de las relaciones de poder. El film se constituye como un retrato extemporáneo de ignorancia y opresión logrando una narrativa poderosa y perturbadora».
El jurado del apartado Canarias Cinema, compuesto por Julieta Juncadella, Alba Paz y Jesús de la Peña otorgó el Premio Richard Leacock al Mejor Largometraje a la película Rendir los machos de David Pantaleón «por su precisión y belleza formal para retratar una historia, a sus raíces y paisajes». «Una mirada cinematográfica que», a su juicio, «es singular y prometedora». Y concede el Premio Richard Leacock al Mejor Cortometraje a Bancal de Rafael Montezuma “por la elegancia con la que retrata a un personaje, su espacio y tiempo con un uso deslumbrante del sonido y la imagen”. El jurado de Canarias Cinema otorgó, además, una mención especial a Una flor en el vacío de Jesús F. Cruz «por el riesgo al mezclar formatos y materiales dando como resultado una pieza de ficción con un tono muy personal e íntimo». El corto Time (L)over de Álvaro Pinell se hizo con el Premio Digital 104 a la distribución, hecho público el pasado lunes, «por su capacidad de transmitir una historia universal desde la sencillez y desde la simetría como metáfora del amor condicionada por el tiempo y en el que sus engranajes marcarán su destino», según valoró el jurado de la productora audiovisual canaria formado por Jonay García y Andrea García.
En esta vigésimo primera edición, el Festival de Cine vuelve a contar por tercera vez con la Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales CIMA. Alba Sotorra, Dácil Manrique de Lara Millares y Nieves Maroto reconocen obras que contribuyen a la sensibilización y el compromiso social por la igualdad de género. Como jurado, las tres han decidido otorgar el premio, en este caso compartido, a las películas Geographies of Solitude y a La ligne. El jurado premió Geographies of Solitude de Jacquelyn Mills «por ser un retrato de una mujer que ha entregado su vida a la investigación y a la conservación de la naturaleza, con reflexiones profundas sobre la vida, la muerte y la intervención humana en un diálogo íntimo con la directora que, con valentía, experimenta con el cine y la creación artística en un entorno de pura conexión con la vida». Por su parte, del largometraje La ligne, el jurado CIMA pone el valor «el trabajo magistral de una directora que nos presenta una película contundente y poderosa. Con un excelente trabajo de dirección de actrices, una cinematografía elegante y un guion elaborado con personajes femeninos profundos de brillante interpretación. Un retrato complejo de la difícil relación entre hijas y madre y el crecimiento interior de la protagonista».
